El activista de los derechos humanos, Nepomuceno Moreno Núñez, quien en los últimos meses se dedicó a la búsqueda de su hijo que al parecer fue secuestrado y asesinado en compañía de unos amigos en Cajeme, ayer fue acribillado por unos desconocidos cuando circulaba en su vehículo a plena luz del día y en transitadas calles de la ciudad.

Moreno Muñoz mantenía un constante activismo al denunciar que su hijo había sido secuestrado por policías de Sonora y participó en el movimiento por la paz que encabeza Javier Sicilia

De acuerdo a información de la Policía Estatal Investigadora, quienes indagan el homicidio, Moreno Núñez fue agredido con proyectiles de arma de fuego alrededor de las 12:15 horas en avenida Reforma e Ignacio Pesqueira, de la colonia Centenario.

Moreno Núñez circulaba a bordo de un pick up de la marca Chevrolet, de color azul, modelo 1997 con placas de Sonora, cuando fue agredido con arma de fuego, tras ser alcanzado por unas personas en otra unidad que se dio a la fuga, quedando sin vida en el interior del carro con varias heridas en diferentes partes de su cuerpo.

En el lugar de los hechos personal de Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia en el Estado aseguró siete casquillos percutidos calibre .40 milímetros, por lo que de los hechos dio fe el Agente del Ministerio Público del Fuero Común, quien ordenó el levantamiento y traslado del cuerpo para realizar las diligencias de ley.

Cabe mencionar que las autoridades de justicia mencionaron que dicha persona tenía alrededor de un año y medio de haber salido del Cereso, donde estuvo detenido por portación y posesión de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, luego de que se le involucrara con la agresión armada que sufrió una casa ubicada en Residencial Los Lagos, ocurrida en noviembre del año 2005.

Moreno Núñez, de 56 años de edad, tenía su domicilio en la colonia Los Arcos, y acudió en varias ocasiones a manifestarse en Palacio de Gobierno, donde declaraba a los medios de comunicación la desaparición de su hijo en compañía de unos amigos en Cajeme, y lo que deseaba era dar con su paradero.

Hace unos dos meses, Muñoz Moreno reconoció a través de una entrevista radiofónica que lo habían amenazado de muerte por el activismo que mantenía para encontrar a su hijo Jorge Mario Moreno León.