Un caótico regreso a clases tuvieron decenas de planteles que albergan miles de alumnos de educación básica, donde no pudieron iniciar el ciclo escolar 2014-2015 debido a la contingencia ecológica en el Río Sonora y la falta de infraestructura básica como mesabancos, pizarrones, sanitarios y suministro eléctrico para los aparatos de aire acondicionado.
El regreso a clases fue pospuesto una semana en 88 escuelas debido a la contaminación por metales pesados del Río Sonora, donde la mina de Cananea, Buenavista del Cobre Grupo México, derramó 40 mil metros cúbicos de ácido sulfúrico; este paro afecta a 5 mil 806 alumnos que cursan preescolar, primaria o secundaria en planteles públicos de seis municipios de la cuenca del Río Sonora.
Como hace más de 10 días que inició la contingencia ambiental, padres de familia lamentaron que sus hijos no puedan iniciar a tiempo el ciclo escolar, al considerar que la Secretaría de Educación y Cultura (SEC) tuvo el tiempo suficiente para garantizar el abasto de agua en las escuelas.
"El gobierno (de Sonora) tuvo suficiente tiempo para analizar la forma de darle agua a nuestros hijos en las escuelas, peligran más en la casas o las calles, bien pudieron limpiar tinacos y cisternas para tener todo listo para el regreso a clases, pero no, prefirieron complicarnos más la vida a los padres, que no tenemos donde dejar los niños para ir a trabajar ahora que la situación económica está más complicada por el derrame de la mina”, declaró Bertha Domínguez.
ESTÁN MÁS SEGUROS EN LA ESCUELA: MAESTRO
Jaime Varela Salazar, profesor emérito de la Universidad de Sonora con especialidad en ingeniería química y metalurgia, opinó que ante la contingencia ambiental los niños estarían más seguros en las escuelas que en sus hogares.
"Deberían tomar en cuenta a los padres de familia, los niños están más seguros en la escuela que en la calle porque se van a ir al río contaminado o a jugar, cuando podrían estar en el salón con agua potable para su consumo y darles un ciclo de conferencias donde les expliquen el problema”, consideró el especialista.
En esta capital de Sonora, al menos 10 planteles presentaron serios inconvenientes para retomar las actividades, como en la Escuela Secundaria General 10 donde los alumnos no tenían mesa bancos y tuvieron que sentarse en el piso; o la escuela primaria Mariano Azuela que alberga 900 alumnos.
"Los techos están a punto de caerse por la humedad y la antigüedad, los baños ni se diga, las canchas, tenemos un aula que se supone que es de computación pero no la hemos abierto por miedo a un derrumbe, por eso venimos a platicar con el Gobernador porque supuestamente invertirían 2.5 millones de pesos y nada”, afirmó Daniel Flores, padre de familia que abordó al mandatario Guillermo Padrés Elías durante el evento oficial por el arranque del ciclo escolar 2014-2015.
