En el poblado Miguel Alemán, sus habitantes sufren el abandono por parte de las autoridades de los tres niveles de gobierno.
A pesar de estar ubicada en la zona agrícola más productiva de Hermosillo, esa comunidad se encuentra prácticamente en el abandono con calles intransitables por fugas de agua potable y drenaje.
A esto se suma la inseguridad, el alcoholismo y la drogadicción que han atrapado a jóvenes y adultos que han dejado de ser productivos, y ahora representan un fuerte problema que limita el avance de ese poblado.
En las pocas escuelas con que cuenta el poblado Miguel Alemán, los alumnos sufren a la falta de infraestructura, lo que obliga a los maestros a trabajar prácticamente con las uñas para sacar adelante a sus alumnos.
Desde la entrada a esa comisaria, se percibe el abandono con calles sucias y espacios públicos descuidados y ocupados por personas que cayeron en las garras de alcohol y las drogas, que en ese lugar se venden sin ningún tipo de restricción.
El abasto de agua potable también es un problema con el que batallan en el poblado Miguel Alemán, donde no hay calle que no cuente con alguna fuga de agua potable y drenaje.
Los habitantes de la comunidad agrícola se sienten solos y abandonados por la clase política que durante las campañas electorales, prometen de todo y ya en el poder se olvidan de ellos.
Los grandes charcos que forman las fugas de agua potable y drenaje, generan la proliferación del mosco del dengue, lo que provoca que mucha gente sufra las consecuencias de esta enfermedad.
Casi en la entrada al pueblo, muy cerca de la comisaría, sobre la carretera 100, una obra inconclusa ha formado una laguna de aguas negras que ya lleva varios meses afectando a los vecinos alrededor.
Para quienes han sido testigos del crecimiento del poblado Miguel Alemán, lo que ahora se sufre es consecuencia del abandono en el que han estado durante muchos años.
Fuente / Reportero: Martín Vallejo
