Por Gerardo Moreno /

Especialistas coinciden en la necesidad de primero analizar todas las repercusiones e impactos en la estructura social que traerá para México; en Sonora el Código de la Familia es claro, el matrimonio es entre hombre y mujer  

Con la iniciativa de reforma presentada por el presidente Enrique Peña Nieto para elevar a rango constitucional los matrimonios entre personas del mismo sexo comenzó todo un debate social, donde cada persona muestra su punto de vista, el cual puede diferir en muchos sentidos, pero concuerdan en un punto, se debe discutir a fondo.

En ese sentido, Primera Plana consultó a una serie de expertos para ver las implicaciones, escenarios y hasta complicaciones que desde lo legal, social, filosófico y legislativo, atraerá esta determinación que deberá discutirse en el Congreso de la Unión.

Los especialistas concuerdan que aunque parezca inminente la aprobación legal de esta figura, también es necesario analizar las repercusiones sociales y consecuencias finales en la estructura social que traerá para México, así como fijar claramente algunas limitantes.

El doctor Miguel Ángel Soto Lamadrid, coordinador del posgrado en Derecho de la Universidad de Sonora, precisó que el caso de los matrimonios entre personas del mismo sexo, aunque actualmente estén prohibidos por las leyes locales y se tenga que ir a litigio para obtener un amparo, con el panorama actual serán una realidad legal, que tarde o temprano todos deberemos respetar, aunque algunos puedan no estar de acuerdo.

Doctor Miguel Ángel Soto, especialista en Derecho de la Universidad de Sonora.

Precisó que actualmente el estado de Sonora cuenta con un “Código de Familia” que define al matrimonio como la unión de hombre con una mujer —al igual que 29 estados más—, sin embargo, desde hace tres años el Distrito Federal cambió su Código Civil para definir el matrimonio como “la unión de dos personas”, dando así cabida a los matrimonios gay. Algo replicado en otras entidades como en Coahuila, Quintana Roo y Morelos.

Recordó que en el 2013, el entonces Procurador General de la República interpuso una acción de inconstitucionalidad contra la decisión del DF, sin embargo, los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolvieron que esas uniones sí son constitucionales.

“La Corte resolvió que esos matrimonios no eran inconstitucionales, sino todo lo contrario, porque evitaban la discriminación por cuestión de preferencia sexual, entonces determinó que son perfectamente legales”.

En esas mismas fechas seis estados de la República (entre ellos Sonora y Jalisco), interpusieron una controversia constitucional para que la SCJN declarara que los matrimonios homosexuales celebrados en la Ciudad de México no fueran válidos en sus entidades. Pero de nuevo los ministros resolvieron que estaban equivocados, porque la misma Constitución dice que los actos del Registro Civil celebrados en cualquier estado tienen validez en todo el territorio nacional.

Pero no solo eso, resaltó que en los últimos dos años en Sonora ya ha habido alrededor de ocho matrimonios entre personas del mismo sexo. Esto gracias a la figura del amparo: “es decir, que quien desea casarse va y solicita al Registro Civil el acta de matrimonio, ahí se los niegan, van al amparo y el juez de distrito les concede, invariablemente, el amparo basado en la resoluciones de la Corte y obliga que los casen”.

Por esto, el doctor Soto Lamadrid apuntó que no es algo nuevo, ya está sucediendo. Sin embargo, también la Suprema Corte está a punto de generar jurisprudencia en el caso y obligar al Poder Legislativo que cambie la constitución: “la Corte puede, cuando hay cinco resoluciones en un mismo sentido y ninguna contraria, exigir al órgano Legislativo que modifique la norma considerada institucional”.

De tal forma, que el tema de manera legal ya estaba encaminado, y se aprecia como un tema indetenible.

“La última reforma que mandó el presidente… elevaría a grado constitucional el matrimonio entre personas del mismo sexo, entro otros y en ese momento todos los Códigos Civiles de la República que impidan el matrimonio entre homosexuales quedarían inmediatamente como inconstitucionales”.

El experto en derecho aclaró que alguien puede estar de acuerdo, o no, con el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero tendrán que aceptarlo. Porque legalmente y basados en el derecho civil, en el respeto a las garantías individuales y el principio de no discriminación por preferencias sexuales, todos estipulados en la propia constitución, este será legal y las leyes se deben respetar.

Adriana Moreno Valenzuela, presidenta de la asociación “Cultura y Familia por la Sociedad” (CultuFam), explicó que el tema es un asunto delicado que debe analizarse a detalle antes de aprobarse, sobre todo tratando de prevenir posibles consecuencias en la conformación de la sociedad y los valores que en ellas se promuevan, en lugar de simplemente verlo como una cuestión de gustos personales.

Adriana Moreno, presidenta de la asociación “Cultura y Familia por la Sociedad” (CultuFam).

Aclaró que el Matrimonio es la unión de dos personas que buscan un bien común, que es formar una familia donde se procure el desarrollo integral de todos sus miembros, como fin debe buscar procrear, educar y lograr que los hijos se desarrollen integralmente, al igual que los padres, y de esta forma contribuir al desarrollo de la sociedad.

Precisó que esta forma de organización ha existido desde hace ya miles de años, incluso antes de la religión y los gobiernos, es la forma básica de organización de la sociedad. Sin embargo, en el concepto de matrimonios entre personas del mismo sexo se rompe este bien superior que busca el matrimonio y la familia.

Explicó que se están utilizando elementos falsos para tratar de legitimar una unión entre personas del mismo sexo como un matrimonio. Por ejemplo, se dice que el casarse es un derecho humano básico y una decisión personal que el Estado y la sociedad en general debe respetar, por lo tanto una pareja del mismo sexo puede casarse porque es una determinación que ellos en lo individual, sin embargo, al hacerlo bajo ese argumento se quita el carácter del bien común del matrimonio y se modifica por el bien de la persona, afectando así todo el concepto de familia.

“El matrimonio es más que un simple acuerdo legal entre dos personas, que firman un convenio donde se muestra la voluntad de las partes. Es una verdadera unión de las dos partes con el fin de conformar la familia, con el objetivo de buscar el desarrollo de cada miembro y así abonar al desarrollo de la sociedad. Y al hablar de unión como una decisión personal se le quita este carácter superior del matrimonio”.

La maestra Moreno Valenzuela aseguró que esto no quiere decir que cada persona no esté sujeta a derechos y garantías individuales, pero tampoco que al respetarse o tratar que se respete a través de leyes (como en el caso del matrimonio entre personas del mismo sexo) se deba hacer afectando a toda una estructura social establecida.

El deseo de unirse y vivir juntos no se afecta, pueden hacerlo -como siempre lo han hecho-, pero se debe analizar qué tan benéfico o no sería promulgar leyes que pongan al mismo nivel de un matrimonio que realmente busca conformar una familia.

Expresó que en lugar de estar desviando la atención en temas que no son tan mediáticos como los matrimonios homosexuales, el Estado debería enfocar su trabajo en resolver otras problemáticas sociales que en estos momentos están afectando a las familias mexicanas, cuestiones como la generación de empleo, la pobreza y marginación, violencia social, adicciones, que afectan e impiden el desarrollo del país.

El doctor Jorge Ballesteros, filósofo de la Asociación Sonorense de Filosofía (Asfil), resaltó que el matrimonio es una institución que merece todo el respeto, respaldo legal y social, por ser el modo natural de formalizar un compromiso entre hombre y mujer, sin embargo, se ha visto amenazado por la tendencia de varios países de aprobar -al mismo nivel- la unión entre personas del mismo sexo e incluso se planea darles el derecho de adoptar niños.

Jorge Ballesteros, filósofo de la Asociación Sonorense de Filosofía (Asfil).

Aclaró que antropológicamente hablando, desde la Grecia antigua se hablaba de la práctica homosexual como un rol social aceptable, sin embargo, nunca se pensó equipararla con el matrimonio. De tal forma, que la figura del matrimonio y la familia está desde la historia y el romper con este concepto o modificarlo es acabar con toda la cultura occidental.

El doctor Ballesteros recalcó que la figura del matrimonio no es sólo una construcción social, sino que es algo universal dentro de la cultura, es la base para la formación de la familia y no es simplemente una forma de legitimación del sexo: “la especie humana, y este es el concepto antropológico primario que también está en la raíz de todo la sociedad, no se divide en homosexuales y heterosexuales, sino entre mujeres y hombres”.

Agregó que se está buscando darles un derecho que realmente la mayoría de ellos no desea, explicó que el porcentaje de personas con preferencias sexuales hacia su mismo género que realmente quiere casarse es muy bajo, por ejemplo, en Holanda desde el 2001 es legal las uniones entre personas del mismo sexo y sólo el 4% de los homosexuales se casaron durante los cinco años posteriores a su legalización, mismo porcentaje sucedió en Suiza.

“Están peleando por algo que realmente no van a usar, simplemente porque no creen en él. Se podría considerar que es más la imagen mediática que tiene este tema que un verdadero interés por lo que significa formar un matrimonio”.

Sin embargo, aclaró que no solo se planea permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo, sino que además se les pretende permitir adoptar niños. Precisó que este punto es todavía más delicado, porque el deber del Estado y la misma Sociedad, es brindar un ambiente que permita el pleno desarrollo de los niños, donde crezcan física y mentalmente plenos, algo que dijo comúnmente no sucede entre las parejas del mismo sexo, por las parejas homosexuales rompen cuatro veces más que las parejas heterosexuales.

“Según la Federación estatal de homosexuales y lesbianas de Estados Unidos, los gays tienen una media de 39 relaciones distintas a lo largo de su vida. Y su duración no suele ser superior a los tres años. Además que las personas homosexuales tiene una tasa de intentos de suicidios seis veces superior al resto de la sociedad”.

De la misma manera, dijo que está comprobado que más del 60% de las personas homosexuales han acudido a atenciones psicológicas o psiquiátricas por problemas emocionales. Y alrededor del 70% cuentan con una enfermedad de trasmisión sexual. En ese sentido, cuestionó ¿una persona con estas características emocionales puede criar y educar a un niño?

“El asunto está que hablan del derecho de estas parejas a tener un hijo, cuando el niño no puede ser objeto de derecho, porque no es un objeto, el niño es primero y fundamentalmente es un sujeto de derechos, no un objeto”.

Entonces, concluyó que el asunto no es que si una pareja homosexual puede tener derecho a adoptar un niño, sino que ese niño es una persona con derechos y por lo tanto se debe velar por el bien superior del niño y este no se garantiza en un hogar con padres del mismo sexo: “en la adopción, se trata de dar una familia a un niño y no un niño a una familia”.

El nuevo Arzobispo de Hermosillo, Ruy Rendón Leal, aclaró que los matrimonios que la Iglesia Católica reconoce son la unión entre un hombre y una mujer, porque obligadamente esta institución debe estar abierta a concebir vida, es decir, tener hijos y crear familias.

Nuevo Arzobispo de Hermosillo, Ruy Rendón Leal.

“El tema de las bodas entre personas del mismo sexo está en boga por la iniciativa del presidente Enrique Peña Nieto. Pero yo quiero decirles que la Iglesia Católica, fiel a su tradición, pero sobre todo a partir de la sagrada escritura, entendemos que el concepto de matrimonio es entre un hombre y una mujer. Es la manera de pensar de nuestra fe cristiana y católica, como arzobispo yo sigo este principio, el matrimonio es entre un hombre y una mujer porque siempre debe estar abierto al don de la vida”.

En ese sentido, precisó que la Iglesia no puede avalar las bodas gay y no pueden ser consideradas como matrimonios, porque faltan a este principio fundamental del fin del matrimonio.

Sin embargo, aclaró que las parejas entre personas del mismo sexo pueden tener otro tipo de unión legal donde también tengan protección legal del Estado, porque son personas que merecen todo respeto y deben participar de los dones y amor de Dios.

“Entiendo también que las personas que tienen diversas preferencias sexuales son seres humanos y como tales merecen toda la atención, respeto, son hombres y mujeres que tienen una gran dignidad”.

Rendón Leal recalcó que la iglesia no está condenando a estas personas por tener ese tipo de preferencias sexuales, al contrario, les debe ofrecer un acompañamiento y la palabra de Dios, a fin que ellos reciban también el amor de Dios.

“Yo acepto que puede haber sociedades de convivencia, como hace años se establecieron en algunos estados del país, obviamente las leyes deben de respaldar a estas personas que hacen esas sociedades de convivencia, para que tengan las prestaciones y recursos de ley, para que no haya alguna cuestión que vaya en contra de ellos mismos, pero vuelvo a decir que la postura de la Iglesia es que el matrimonio es entre un hombre y una mujer”.

Por su parte, los legisladores de los diferentes grupos parlamentarios con presencia dentro del Congreso del Estado aclararon que el tema de los matrimonios gay es algo que se debe discutir y verdaderamente analizar a fondo, sin embargo, es algo que no sucederá en corto plazo en Sonora:

Epifanio Salido, líder de la bancada del PRI en el Congreso de Sonora.

Por ejemplo, el coordinador del grupo parlamentario del PRI, Epifanio Salido Pavlovich aclaró que el tema se deberá discutir al interior del Congreso de la Unión, pero al ser una Reforma Constitucional requerirá la aprobación del 50% más uno de los Congresos Locales y es ahí cuando le toque a Sonora discutirlo, antes ni siquiera está en la agenda.

“El debate se va a dar en su momento y por supuesto que estamos abiertos para hacerlo. Actualmente la discusión está en el Congreso de la Unión, se mandó la iniciativa por el señor presidente de la República y muy seguramente, tanto como la cámara de diputados y senadores, emitirán una resolución y en su momento nos tocará a nosotros y vamos a esperar el momento para hacer una discusión en torno a esta reforma”.

Recalcó que el estado de Sonora tendrá que estar preparado para dar el debate, porque por ahora el Código de la Familia estipula que el matrimonio es entre hombre y mujer, y así debe respetarse hasta después que emita una resolución a nivel federal y luego se homologue en lo local.

Por su parte, el coordinador del grupo parlamentario del PAN, Moisés Gómez Reyna aseguró que este tema va requerir de análisis, debate y escuchar a la gente, poniendo sobre la mesa todos los puntos de vista antes de tomar una determinación.

Sin embargo, aclaró que Acción Nacional es un partido que considera al matrimonio de hombre y mujer como la célula fundamental para la creación, fortalecimiento y robustecimiento de una de las instituciones más importantes que es la familia y defenderán esta postura.

“Nosotros seguiremos promoviendo el fortalecimiento de la familia y vamos a impulsar porque podamos salvaguardar ese patrimonio, vamos a ser respetuosos de la ley y ser atentos a lo que la sociedad diga, tenemos que entender que la sociedad es cambiante, que hay mecanismos y modelos de convivencia que se deben reconocer y tutelar desde un ámbito reglamentario, pero en su momento vamos a participar en ese debate”.

Por otro lado, el coordinador del grupo parlamentario de Nueva Alianza, Fermín Trujillo Fuentes, aseguró que este tema es una cuestión que llegará a Sonora y obligará a todos los legisladores y ciudadanos a analizar las consecuencias reales de modificar la forma en que se están construyendo las familia y por ende la misma sociedad misma.

“Hay que darle la bienvenida al tema, porque es como si quisiéramos detener el mundo y su viada, la generación de sociedad es muy dinámica, no estoy tan claro que consecuencia va a tener en la misma, pero estoy claro en que debe suceder y debe llegar el tema sin que la sociedad se ruborice”.

El diputado opinó que es algo que invariablemente aprobaría porque considera es un tema que trata derechos humanos y garantías individuales, pero añadió también deberá abrirse espacio para el análisis.

http://www.primeraplanadigital.com.mx/archivos/682688