La información oficial de que en Hermosillo operan 26 grupos delictivos y que están activos 300 tiraderos de droga, es una terrible noticia que pone los pelos de punta al más pelón, y de ese tamaño es la responsabilidad de las autoridades policiacas para combatir a la delincuencia organizada y desorganizada.
El secretario de Seguridad Pública, Adolfo García Morales, reconoció que en la capital sonorense operan 26 distintos grupos delictivos que ya están identificados, y son los culpables del robo de vehículos, comercios y casas.
“Empezaron en Ciudad Obregón, luego se pasaron a Guaymas, ahora andan en Hermosillo, es un grupo de cuatro personas que buscan autos nuevos”, declaró García Morales respecto a un identificado grupo de ladrones de automóviles.
Esas 26 bandas delictivas explican la ola de violencia en Hermosillo, y no se descarta que estén diseminadas como metástasis cancerosa por los principales municipios, donde también sufren el azote de la delincuencia.
La operación de 300 tiraderos de droga en la capital sonorense se agrega para elaborar un peligroso coctel que pone en riesgo la seguridad de las familias hermosillenses.
Para atacar esas bandas delictivas, el gobierno estatal le invierte recursos al equipamiento de los cuerpos policiacos, y a la prevención y lucha inteligente a través del Centro de Control y Confianza (C5i), así como con la conformación de un equipo de trabajo con elementos de la Policía Estatal Investigadora, Policía Estatal de Seguridad Pública, Unidad de Inteligencia y con la Policía Municipal, además de agentes federales.
El secretario de Seguridad García Morales, confía en que pronto habrá resultados, con la detención de estos grupos criminales que están afectando a Hermosillo pues ya conocen su “modus operandi” y las colonias donde delinquen.
Y esos problemas de inseguridad solo son en el caso de bandas dedicadas al robo de vehículos, comercios y casas, falta agregar a los grupos de narcos que operan en Hermosillo y en otros municipios, por lo que a García Morales y al alcalde Maloro Acosta “les tocó bailar con la más fea”. 
El reconocimiento por parte de García Morales del número de bandas delictivas que operan en Hermosillo, creo que es para que los ciudadanos vean el tamaño del problema de la inseguridad y el reto que tienen las autoridades de los tres niveles. 
Presentar la realidad “sin maquillaje” es el compromiso de la gobernadora Claudia Pavlovich, quien ha declarado que “ignorar los problemas de seguridad que hoy padecemos las familias sería catastrófico”.
“No es momento de cerrar los ojos y decir que no pasa nada”, aseguró al tiempo de hacer un llamado para que los tres niveles de gobierno y la sociedad civil organizada hagan la parte que les corresponde para hacerle frente a este problema que amenaza la seguridad y la tranquilidad de las familias”, dijo hace semanas durante la puesta en marcha del Plan Estatal de Prevención Social de Violencia y la Delincuencia, denominado “Escudo Ciudadano”, y atestiguar la instalación del Consejo Directivo de Transversalidad para prevenir el delito en todas sus formas.
NO JUZGARAN A JAVIER GANDARA POR EL HERMOSILLO FLASH
Con la polémica por la propuesta de restituir la Torre de Hermosillo Flash en su lugar original donde fue derrumbada, se ha ventilado que se podría acusar al ex alcalde panista Javier Gándara Magaña, por cometer un delito patrimonial por atentar contra el patrimonio de los hermosillenses.
Aunque fue el gobierno de Padrés el que derrumbó la torre de información digital de la familia de Eduardo Gómez Torres, al entonces alcalde panista se le cargaron los platos rotos por avalar la destrucción y negarse a respetar la concesión otorgada a Gómez Torres para operar la pantalla electrónica.
Lo anterior ocasionó que un juez ordenara al actual Ayuntamiento presidido por el Maloro Acosta, el pago de 77 millones de pesos a la empresa afectada por los 65 años que le restan de operar el Hermosillo Flash, ya que la concesión es por 90 años.
Apuesten doble contra sencillo que el ex candidato panista a la gubernatura Javier Gándara Magaña, seguirá intocable, pues no ha sido tocado ni por las denuncias de desfalcos en su administración municipal en el organismo operador de Agua de Hermosillo ni por la venta ilegal de terrenos del Vado del Río al entonces dirigente estatal panista Juan Valencia Durazo, ni por varias “chuecuras" más.
Para responder a las acusaciones de responsabilidad por tumbar la torre del Flash, Javier Gándara Magaña, a través de su cuenta twitter se deslindó por el proceso que concluyó con la demolición de la pantalla informativa en el 2010.
“En todo momento nuestra administración actuamos con total transparencia y absoluta responsabilidad, viendo por el bienestar de los Hermosillenses”, señaló el ex alcalde en redes sociales.
Lo cierto es que Gándara Magaña le negó a la empresa Hermosillo Flash la reubicación en el mismo bulevar Encinas, dejando el problema legal a las siguientes administraciones municipales.
Y ahora tranquilamente el ex alcalde Gándara Magaña se trata de “lavar las manos” al aclarar que la demolición de la Torre del Flash el 27 de mayo del 2010 fue realizada por el gobierno estatal a través de la SIDUR, cuyo titular José Inés Palafox, soltó la tristemente célebre frase “ya traía muchas ganas de echármelo (al Hermosillo Flash)”.
Si nos atenemos a la versión de Gándara Magaña, y de su ex colaborador en la CIDUE, Mario Méndez, de que la demolición de la estructura del Flash se contemplaba en las cláusulas de la concesión a la empresa otorgada por el Ayuntamiento porque afectaba los derechos de vía del bulevar Encinas, la defensa legal será larga, costosa y tediosa, sin llegar a tocar un pelo de los pocos que tiene el ex alcalde panista hermosillense. A estas alturas no tiene caso abrir más frentes de guerra, ya bastante tienen con el litigio con la familia de Gómez Torres. (g_navarro_ruiz@hotmail.com)