Buen aplausómetro para la Guevara



Como se ha documentado en los meses más recientes, el advenimiento de las campañas políticas mantiene alborotados a los aspirantes a diferentes puestos  de elección popular.

Pero, conste, no para lograr la mirada del respetable (como decían los legendarios cronistas de los juegos de beisbol), sino para tener la atención del jefe político que habrá de definir o recomendar sus posibles candidaturas.

Dígase Gobernadores de Estado, Alcaldes, Senadores, Presidentes de partido o qué sé yo.

Gente de poder, pues.

Y no solo nos referimos al caso del director general de los Conalep en Sonora, Guillermo Díaz, quien este miércoles estuvo con los periodistas de la Mesa Cancún hablando de su trabajo y de sus posibilidades en las urnas para el 2024. O de otros políticos que ejercen en el servicio público y que quieren seguir en la nómina oficial.

Igualmente no podemos descartar las legítimas aspiraciones políticas de personajes que al estar en la banca, están más desesperados que un trabajador por los aguinaldos.

Tampoco debemos olvidar las ilusiones  de los perfiles ciudadanos que, por alguna recomendación o influyentismo, se han adherido al partido en el poder (Morena).

¡Vaya, pues!

El caso es que, de la misma manera pero en contra parte, las cúpulas de la oposición en pro de un reclutamiento de personalidades que les produzcan votos para salir de su mala racha, han invitado a empresarios, deportistas, artistas y figuras públicas populares que pudiesen ganar algún puesto.

Y una de las variadas estrategias para llamar la atención del jefe político de cualquier partido, es provocar una buena reacción de los votantes que se encuentran en cualquier lugar público; ya sea en una reunión exprofeso, en un mitin, en un concierto, en un centro comercial o en un evento deportivo.

Con más razón porque esos actos quedan grabados a través de la tecnología de los teléfonos celulares.

Uno de estos hechos que llamó la atención, por cierto, fue la presencia de algunos políticos en el Estadio Fernando M. Ortiz durante los juegos de la Copa Mundial de Softbol Varonil Sub 18; ya que al confundirse con los aficionados en las gradas, disfrutaron del sub campeonato de México en contra del campeón Japón -en un partido que se fue a ocho entradas-.

Algunos de esos políticos estuvieron esperanzados a que los bajaran de las butacas para lanzar la primera bola en el centro del diamante ubicado en el campito ubicado detrás del CUM.

Distinción que solamente se la dieron al titular de Sidur, Omar Del Valle Colosio; a la directora general de la Conade, Ana Gabriela Guevara; a los honorables ex deportistas y miembros del Salón de la Fama del Deportista Sonorense como José Antonio “Mechudo” Fabrett, Eloy “Topo” Zepeda y Javier Platt Lucero; además de Carlos “Mochomo” Parra y “Borrego” García.

Resulta importante comentar que, allí mismo en el estadio, ante la zozobra y algunos malos pronósticos que se hacían en contra de la ex velocista por el inminente aplausómetro, al final de cuentas le fue muy bien; ya que la ovacionaron por la figura pública que ha sido y por los triunfos que le dio -en las pistas de atletismo- a Sonora y a México.

Lo cual nos hizo sentir orgullosos.

De la misma forma aplaudieron al titular de Codeson, Erubiel Durazo, de quien algunos expertos en temas políticos están esperando a que se anime para alguna candidatura; la cual, al parecer, no le apura.

Aunque tampoco quiere decir que no la quiera.

Las ovaciones a ambos -a Guevara y a Durazo-, se dieron básicamente por ser las grandes figuras que han sido para el deporte en México; y en agradecimiento por traer este evento que disfrutó la afición de Hermosillo, de otros municipios de Sonora, de la República Mexicana y del extranjero, ya que tuvimos visitantes de más de diez países.

Situación que también generó un buen impacto económico a favor de los prestadores de servicios turísticos de nuestra ciudad.

Ultimo comentario de hoy.

El siguiente tema lo voy a iniciar con una analogía de apenas tres renglones.

A mediados de los años 70’s era común que cuando uno se peleaba en el barrio con otro compañero y salíamos perdiendo, al llegar a la casa todavía nos pegaba mi amá con el cinto más grueso de mi apá o con la chancla de cuero mojada porque así nos dolía más.

Castigo que nos hacía pensarla más de dos veces y en el futuro no andar buscando pleitos.

Esto lo traigo a colación por las ocurrencias de unos Diputados Federales de Morena y sus aliados, que quieren incrementar de 36 a 72 horas de arresto a los cantantes que se equivoquen en la entonación de nuestro Himno Nacional Mexicano.

Por la extraña comparación que acabo de hacer, si usted quiere calificarla así, no hace falta castigar más al artista que se equivoque en la letra de la obra de Francisco González Bocanegra.

Ya que con el solo hecho de haberse exhibido tan feo ante millones de televidentes, cibernautas y público presente en cualquier evento, tiene  un castigo más que suficiente.

Los memes y las burlas no solo están al día, sino al segundo en las redes sociales de internet y diferentes canales de comunicación.

Por esta semana fue todo.

Espero que todo esté bien.

Seguimos el lunes.

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