Sergio García / Debate
La tristeza se puede tocar en el aire seco y el polvo caliente de la colonia Insurgentes durante el sepelio de Meredith, Medelin, Karla y su madre Margarita, asesinadas este fin de semana en la comisaría Miguel Alemán.
Familiares, amigos y vecinos se reunieron para despedirlas en medio de un profundo dolor y una exigencia generalizada de justicia.
Las pequeñas, dos gemelas de 11 años y su hermana menor de 9, fueron halladas sin vida el sábado 5 de julio, mientras que su madre fue localizada un día antes, víctima también de homicidio.
La condena social ha sido total en redes sociales donde se exige justicia para las niñas y su madre asesinadas.
El sepelio se realizó en las calles Bacanora e Israel González, en la colonia Insurgentes, una de las más populares del Norte de Hermosillo, con temperaturas de 45 grados, lo que hacía más gravoso el dolor.
La casa de la abuela, de material, pero con cerco de tablas y alambre dio alojamiento a los cuatro ataúdes, a los familiares y al dolor de la familia, cuyas mujeres lloraban sin consuelo.Último adiós a tres niñas y su madre en Sonora | Foto: Sergio García / Debate
El padre de las menores se encontraba aún en shock y se negó a dar declaraciones y prohibió terminantemente fotos o videos.
Decenas de amigos, vecinos y compañeros de escuela de tercero y sexto de primaria acudieron a despedir a las niñas, sus amigas y compañeras de clase, en medio de un ambiente cargado de impotencia.
Me duele mucho la verdad, y quiero que se haga justicia por las cuatro (…). Ojalá que caigan todos los muchachos que hicieron esto, que se haga justicia con la sentencia máxima, con cadena perpetua”, pidió Carlos Antonio, padre de las menores y ex esposo de Margarita.
Líder buscadora impactadaLa tragedia quedó al descubierto gracias al colectivo Buscadoras por La Paz. Cecilia Delgado Grijalva, su líder, relató que una llamada anónima alertó sobre la ubicación de los cuerpos.
Primero hallaron a Margarita, con signos de violencia y heridas de bala; un día después, localizaron a las niñas abrazadas bajo un árbol. “Nunca nos dijeron que eran niñas. Fue muy aterrador, muy fuerte… A lo largo de estos años he visto de todo, pero nada me había impactado tanto como la escena de ellas, abrazadas, protegiéndose y con una cara de terror”, dijo.
Cecilia Delgado pidió también la pena máxima para los que hayan cometido un crimen tan horrible.